LA OPINIÓN

Según lo que entendí que dice el diccionario: "Opinión" es una pequeña parte de una verdad a la que adherimos y que puede o no ser "la verdad".
Me puse a pensar que todos estamos muy acostumbrados a opinar. Opinamos sobre política, sobre economía, sobre fútbol, sobre religión y la mayor parte del tiempo opinamos sobre las personas.
Como lo que estamos expresando es "nuestra verdad" o la visión que tenemos de las distintas situaciones y de la gente, al opinar lo hacemos afirmando y dándole la connotación de "ésto es así". 
Por costumbre y desde chicos, siempre le hemos dado mucho valor a la opinión ajena. Llegábamos a una escuela nueva y enseguida nos decían: "ojo con aquel que te roba de la cartuchera", "la maestra de lengua es una bruja", "pedile a la portera que vaya al kiosco porque es re buena", etc., etc.
Así, aprendimos a adherir a esas verdades "subjetivas" de los demás y muchas veces las creímos y creemos como "verdad".

Acá me detengo y hago la primera reflexión:
Si todos los que opinan están convencidos de que tienen la verdad sin tener en cuenta de que no manejan todos los datos, pruebas y fundamentos para afirmar con certeza irrefutable de que "eso es así", entonces jamás debo aceptar, adherir y asumir que por ejemplo la maestra de lengua es mala. ¿Es mala para quién? ¿Para el que nunca estudia? ¿Para el que se copia en las pruebas? ¿Para el que tiene mala conducta? ¿Desde qué lugar la persona que opina, está opinando?. 
Lo mejor entonces es hacer nuestro propio camino en la búsqueda de conceptos e ideas. Es sacar nosotros mismos las conclusiones en base a la experiencia propia de las cosas y las relaciones con las personas. ¿Qué mujer resentida va a hablar bien de su ex marido? ¿Qué capitalista va a hablar bien de un socialista? Todo será relativo al "paisaje" de quien opina, incluso el nuestro.

Ahora bien, voy por la segunda reflexión:
Si los demás sólo tienen una idea parcial y personal de lo que creen que es la verdad ¿nos tiene que preocupar la opinión que tengan de nuestra persona? 
Si nos conocemos y sabemos quiénes somos ¿importa que alguien piense que somos de otro modo contrario o distinto? ¿Tenemos que vivir pendientes de lo que opinen los demás?
Es inevitable que habrá gente que nos quiere y otra gente que no nos quiere pero el concepto y la valoración que nosotros hagamos de nuestra persona, de nuestra historia y de nuestra vida, debe ser el resultado de un auto análisis. Habrá veces que la opinión pública esté dañando nuestra buena fama y tal vez necesitemos exponer la verdad por una razón de justicia. Habrá veces en que la opinión de alguien sea una mentira intencional para dañar nuestro honor y no tengamos la posibilidad de poner claridad sobre ello.

De todos modos y a pesar de todo, lo único que realmente nos tiene que interesar es "qué pensamos nosotros, de nosotros mismos", porque será la única voz que nos juzgue o nos redima a la hora de dormir.  
Pero no me hagan caso, es sólo una opinión.